La manera más natural de aprender un idioma es escuchándolo y hablándolo, y nada mejor que a través del juego y actividades divertidas que llamen la atención de los niños.
Clases online privadas o en grupos de máximo 3 alumnos por clase para asegurar el aprendizaje de todos. Seguimiento e informes a los padres de todos los avances que hagan sus hijos en clase.